Economía

Economía 2023: ¿Qué debes saber?

La economía es uno de los temas que más interesa y preocupa a los internautas, ya que afecta a todos los ámbitos de la vida, desde el empleo hasta las inversiones, pasando por los estudios o el consumo. Por eso, en este artículo te vamos a contar todo lo que debes saber sobre la economía en 2023, basándonos en las últimas previsiones y datos disponibles.

Empleo: una recuperación desigual

El empleo es uno de los indicadores más relevantes de la situación económica de un país y de sus ciudadanos. Después de la crisis provocada por la pandemia del COVID-19, que provocó una fuerte caída del PIB y un aumento del desempleo en 2020 y 2021, se espera que el mercado laboral se recupere gradualmente en 2023 y 2024.

Sin embargo, esta recuperación será desigual según los países, los sectores y los colectivos. Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), se prevé que el número de personas empleadas en el mundo aumente en 100 millones en 2023 y en 80 millones en 2024, pero aún así no se alcanzará el nivel previo a la pandemia. Además, se estima que habrá una brecha de 75 millones de horas trabajadas en 2023 y de 23 millones en 2024, debido al aumento del subempleo y del trabajo a tiempo parcial involuntario.

Por regiones, se espera que Europa y América Latina sean las más afectadas por la pérdida de empleo, mientras que Asia y África registrarán un mayor crecimiento. Por sectores, se prevé que los más beneficiados sean los servicios, especialmente los relacionados con la salud, la educación y las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), mientras que los más perjudicados serán los vinculados al turismo, el ocio y el comercio. Por colectivos, se espera que las mujeres, los jóvenes, los migrantes y los trabajadores informales sean los más vulnerables ante la crisis.

Estudios: una oportunidad para mejorar la empleabilidad

Los estudios son otro factor clave para el desarrollo económico y social de un país y de sus habitantes. La educación no solo proporciona conocimientos y habilidades, sino también valores, actitudes y competencias que favorecen la empleabilidad, la innovación y la cohesión social.

En este sentido, la crisis del COVID-19 ha supuesto un desafío para el sistema educativo, que ha tenido que adaptarse a las restricciones sanitarias y a las nuevas demandas del mercado laboral. Según la UNESCO, más de 1500 millones de estudiantes se vieron afectados por el cierre de escuelas en 2020 y 2021, lo que supuso una pérdida de aprendizaje equivalente a un tercio del año escolar promedio.

Para hacer frente a esta situación, se han implementado medidas como el uso de plataformas digitales, la flexibilización de los currículos, el apoyo a los docentes o la ampliación de las becas. Sin embargo, estas medidas no han sido suficientes para evitar el aumento de la brecha educativa entre países desarrollados y en desarrollo, ni entre grupos sociales más o menos favorecidos.

Por eso, en 2023 se espera que se refuercen las políticas educativas orientadas a garantizar el acceso universal a una educación de calidad, inclusiva y equitativa. Asimismo, se espera que se fomenten los estudios relacionados con las áreas más demandadas por el mercado laboral, como las ciencias, la tecnología, la ingeniería o las matemáticas (STEM), así como las competencias transversales como el pensamiento crítico, la creatividad o el trabajo en equipo.

Inversiones: un escenario complejo y cambiante

Las inversiones son otro aspecto fundamental de la economía, ya que permiten generar riqueza, crear empleo y financiar proyectos. Sin embargo, invertir conlleva unos riesgos que hay que saber gestionar adecuadamente.

En este sentido, el año 2023 se presenta como un escenario complejo y cambiante para los inversores, debido a factores como la incertidumbre política, la volatilidad de los mercados, la crisis energética, el pico de inflación y tipos o la transición ecológica.

Por eso, se recomienda seguir una serie de estrategias para optimizar el rendimiento y la seguridad de las inversiones, como por ejemplo:

  • Diversificar la cartera: se trata de invertir en diferentes activos, sectores y mercados, para reducir el riesgo y aprovechar las oportunidades que puedan surgir.
  • Invertir a largo plazo: se trata de mantener las inversiones durante un periodo de tiempo suficiente para obtener una rentabilidad adecuada, sin dejarse llevar por las emociones o las fluctuaciones del mercado.
  • Invertir en temáticas: se trata de seleccionar aquellos sectores o empresas que tengan un potencial de crecimiento superior al promedio, debido a su capacidad de innovación, su ventaja competitiva o su alineación con las tendencias globales. Algunas de estas temáticas son la digitalización, la salud, la sostenibilidad o la movilidad.
  • Invertir en finanzas verdes: se trata de apostar por aquellos activos que contribuyan a la mitigación o la adaptación al cambio climático, como por ejemplo los bonos verdes, los fondos de inversión socialmente responsables o las empresas que cumplan con criterios ambientales, sociales y de gobernabilidad (ESG).

Conclusión

Como hemos visto, la economía en 2023 será un tema de gran interés y relevancia para los internautas, ya que afectará a todos los aspectos de la vida. Por eso, es importante estar informado y preparado para afrontar los retos y las oportunidades que se presenten. ¿Te animas a seguir aprendiendo sobre la economía?